El reciclaje es muy importante porque disminuye la cantidad de residuos en el planeta. En lugar de utilizar nuevas materias primas, utilizamos materiales ya usados o los residuos de determinados productos, lo que reduce enormemente el impacto que la producción de un bien tiene en el medio ambiente.

Además de los envases de plástico reciclable y las etiquetas de papel reciclado, varios de nuestros productos están fabricados con materiales reciclados o recuperados, como el R-PET.

El PET reciclado, presente en nuestras bolsas térmicas para sillas de paseo, es un tejido que se obtiene clasificando, lavando, triturando y fundiendo plástico. Durante la elaboración del PET reciclado se generan menos emisiones de CO2 que con otros procesos: reciclar 1 kg de R-PET equivale a reducir las emisiones de CO2 en 3 kg.

Otro material reciclado que utilizamos en nuestros productos es el PLA: platos, termos, vasos y cubiertos están fabricados íntegramente con este material especial derivado de los residuos de productos vegetales, como el maíz y la remolacha. Su origen natural lo hace extremadamente sostenible, respetuoso con el medio ambiente y ecológico, pero sobre todo lo hace adecuado para su uso en productos dedicados a la hora de comer. De hecho, el PLA no libera melamina ni formaldehído en contacto con el calor de los alimentos, y es resistente y seguro incluso en el frigorífico y el microondas.